¿Proceso?

«La palabra Proceso presenta origen latino, del vocablo processus, de procedere, que viene de pro (para adelante) y cere (caer, caminar), lo cual significa progreso, avance, marchar, ir adelante, ir hacia un fin determinado.»

Tras 3 agostos (2014, 2015 y 2016) donde los malos resultados fueron detonantes para la salida del DT de turno y la renuncia intempestiva de Diego Cocca, llega Miguel Ángel Russo a Millonarios, su arranque no fue el mejor pues cayó eliminado en fase previa de Libertadores ante Atletico Paranaense, pero a pesar de eso se repuso y llegó a una semifinal en junio donde caímos vendiendo cara la derrota al último minuto e incluso mereciendo más que el equipo clasificado, llega agosto y los resultados no eran los mejores, eliminados de Copa en Barranquilla y resultados irregulares en la Liga, parecía que se repetiría el círculo vicioso del cambio de timonel en agosto, pero no pasó sino que se decidió apostar a la continuidad e incluso posteriormente, alargar el contrato, y tras una inmerecida y dura derrota en Medellín, el equipo levantó nivel y se tomó confianza para pelear la Liga terminando cuartos la fase regular, en cuartos de final Equidad empata a 2 el global al 77′ pero 7 minutos después, Silva nos pone de nuevo en ventaja, en la siguiente fase ganamos en Cali tras 14 años sin hacerlo, y en la final, tras un empate a 2 global faltando 8 minutos en un estadio rojo y donde dicho empate ponía a celebrar a la grada, Rojas vuelve a deshacer la paridad, calla el estadio y 10 minutos después sella una estrella más.

El arranque de 2018 no fue el mejor tras conocerse la enfermedad de nuestro DT, por lo cual su encargado se hace responsable mientras tanto, el año empieza disputando la Superliga ante Nacional, tras un empate sin goles, todo se definía en Medellín, donde llevabábamos algo más de 6 años sin ganar y en las dos últimas visitas el tiempo de adición nos amargó, Rentería deshizo el 0:0 pero dos goles de Ovelar nos dan otra vuelta más de visitante en 2 meses, otra muestra de coraje y jerarquía como se vio en 2017.

Avanzan los meses y la participación en la Copa Libertadores, teníamos el grupo de la muerte, pero sabíamos que podíamos sacar provecho del doble enfrentamiento ante el «débil» Deportivo Lara, tras un gran partido en Bogotá, a la semana siguiente a todos, de Russo hasta todos los jugadores se les fueron las luces y nos regresamos sin nada desde Barquisimeto, la siguiente chance era ante Independiente en casa, nos pusimos en ventaja y dilapidamos el 2:0, pero dejamos jugar al rival quien empató (como ocurrió varias veces ese semestre) y por Faríñez se evitó la caída en casa, al final, 1 semana después, con un Faríñez soberbio y un golazo de Carrillo, nos conformamos con el cupo a Sudamericana, eso sí, con el sinsabor de saber que con un poco más hubiéramos podido avanzar a octavos de final de Libertadores, instancia que no jugamos hace 21 años y contando. Días atrás, en la última fecha del todos contra todos, disputamos el paso al playoff de la Liga 2018-1, con los resultados de las demás plazas, empatar el 1:0 en contra tempranero nos alcanzaba para avanzar, no solo fallamos en anotar sino que ¡otra vez San Wuilker! evitó que el resultado fuese más abultado.

Llega el segundo semestre con deseos de revancha y de ilusiones que al final se fueron diluyendo como azúcar en el café, pasamos de hacer del Campín un fortín a solo salir a hoy, con los 3 puntos en casa en 2 de 12 partidos disputados, inclusive viendo cómo en Liga no sumamos de a 3 y ya superamos por lo bajo la menor cantidad de puntos en casa tras 7 fechas, además de ver cómo el rival de patio, sin un fútbol encantador y sin definición, pero tal vez con un poco más de corazón y suerte nos elimina de locales, además de lo de ayer ante un aplicado Once Caldas, que no fue el más efectivo, en parte gracias a un Faríñez monumental que nos dio esperanza en remontar solo por lo corto que se veía un 0:1, pero al final que se termina clasificando bien.

Hoy la discusión entre hinchas es si el profesor Russo debe liderar al equipo en 2019 donde salvo un milagro no jugaremos torneo internacional, lo cual es el primer retroceso frente a estos dos años.

Vuelvo al primer párrafo donde definía qué es proceso, ya que muchos de los que desean la continuidad del ex Rosario Central, Boca, entre otros, es según ellos, por defender la continuidad del proceso, la pregunta que cabe acá, ¿qué progreso se ve al no jugar torneo internacional tras 2 años jugándolos? ¿qué progreso se ve pasando de 4 torneos clasificando a playoffs, 2 jugando semifinales y 1 jugando la final entre 2016 y 2017 a no jugarlos en los dos semestres de 2018? ¿Qué progreso se ve pasando del 4º puesto de reclasificación en 2016 y el 2º en 2017 al 13º en 2018? ¿Qué progreso se ve recibiendo de a gol en partido por promedio y con 7 partidos seguidos sin ganar en El Campín con 2 eliminaciones en llaves ida y vuelta en casa entre septiembre y octubre? Para mí, el deseo de continuar un proceso se ratifica con los resultados del día a día y con el juego, resultados que han faltado casi todo el año y con un nivel de juego que no convence ni da resultados. Sé que hemos sido desafortunados, lesiones inoportunas, jugadores en bajos niveles y un DT que salvo unas contadas veces, no salió del 4-3-3 y mantuvo a referentes en la titular pese a su bajo nivel, lo cual hace que la responsabilidad sea compartida.

Por todo lo anterior, así como creo que Russo fue la carta estelar del título de 2017, creo que es quien tiene más responsabilidades en el fracaso del 2018, por lo cual, sin olvidar que le guardo cariño y sin dejar de reconocer que ya es parte de la historia del club, además de admirar su lucha y lo que aprendimos con él, creo que ya dio todo lo que debía dar y es un ciclo cumplido apenas termine el semestre, así como otros cuantos jugadores, unos de ellos referentes a quienes aplaudí y recordaré con aprecio, también se verían beneficiados con nuevos aires.

Ante todo, sé que soy un simple hincha que ni quita ni pone en la dirigencia de MFC, y además recuerdo que «los técnicos se van, los jugadores pasarán» y que el escudo y los colores son más grandes que cualquiera, por tanto, sin importar qué decisiones se tomen, el otro semestre y los siguientes, ahí estaré. Mientras tanto, a esperar el primer milagro de 6 en Pasto, no tanto por el rival, sino por saber cómo Millonarios logrará reponerse de los golpes anímicos de este octubre y sus miedos y saldrá a ganar en donde no ganamos hace 11 años, y luego de eso, nos veremos en el Campín el jueves.

PD: llamado de atención a la directiva y a mercadeo, para ayer no se pedían boletas gratis, pero que la diferencia entre la boleta para abonado y no abonado fueran cagados 6.000 pesos en el caso de oriental alta norte es una bofetada al abonado, o se ponen las pilas o se reducirá el número de abonados el otro semestre.